Cuando los dientes están mal alineados o presentan anomalías, los brackets son los indicados para tratarlos. Aunque los tiempos han cambiado y ahora son más aceptados, no hay que olvidar que los brackets son un tratamiento de ortodoncia que deben ser colocados por un especialista a personas que tienen los dientes mal alineados o presentan otras anomalías. Años atrás muchas personas se resistían a utilizarlos, pero gracias a los nuevos tipos y técnicas hoy son mucho más aceptados. Sin embargo, Andy Alberto Martínez González, ortodoncista y miembro de la Asociación Dental Mexicana y de la Asociación Mexicana de Implantología Bucal, dejó en claro que por ningún motivo deben colocarse brackets sin ser por indicación médica. LA APLICACIÓN Explicó que la ortodoncia es la rama de la odontología general encargada del tratamiento de las anomalías de las estructuras dentomaxilofaciales. Con ella se hace el alineamiento de los dientes para lograr una armonía y funcionalidad. “El tratamiento de ortodoncia se compone de brackets, alambres y ligas; el bracket debe estar en la posición correcta en cada paciente, no es una colocación estándar”, detalló. El experto explicó que diagnosticar al paciente no es fácil, pues hay que hacerle diversos estudios para conocer sus necesidades y definir cómo serán los brackets que utilizará. “Se debe ver el tipo de alambre, el tiempo que los usará, la posición de su colocación, si se van a mover rápido o lento, si el paciente es diabético, la edad, entre otras cosas”, expuso. Los brackets se pegan con una resina especial de gran resistencia pero menos adhesión al diente, lo que ayuda a que no se pigmente o manche, además tiene indicadores de color que evita que al retirarla se desgaste la pieza. Explicó que el alambre es un expansor natural que ayuda a que haga un espacio para que el diente apiñado o en mala posición se coloque, “es como si fuera un riel”, detalló. Sobre la colocación de brackets en dientes superiores e inferiores, dijo que dependerá de la evaluación médica y sus resultados. Fuente: Hora Cero